Cuando llega el calor, parece que nos acordamos más de cualquier remedio y protección para salvaguardarnos de las altas temperaturas. Las lunas tintadas no solo protegerán del sol, muy útiles para zonas calurosas o si llevamos niños ya que necesitaremos menos energía para enfriarlo; también aportarán privacidad a los pasajeros.
Más allá de las funciones estéticas, debes saber que siempre deben estar homologadas. A la hora de tintar las lunas, en España es un requisito imprescindible que las láminas que se vayan a colocar estén homologadas. No te arriesgues y apuesta por el servicio de Autolunas Carabanchel. Nosotros nos encargaremos de todo para no tengas ningún problema cuando vayas a pasar la ITV.
Requisitos para la homologación de las lunas tintadas
Para que las lunas tintadas estén homologadas es necesario que el taller cuente con un certificado de laboratorio. Donde se recoja el modelo de lamina que se emplea y sus especificaciones concretas como: lugar y fecha de instalación, datos del taller y datos de nuestro propio vehículo.
Pero el certificado no tendrá validez si las lunas no están correctamente selladas. Cada cristal tintado deberá tener un sello que se identifique como homologado. Bien en la lámina o en forma de pegatina que se coloca entre la lamina adhesiva y el cristal. Es imprescindible de cara a la ITB ya que sino podrías tener una sanción.
Y, además, es otro requisito que el coche tenga dos espejos retrovisores exteriores, uno a cada lado. Con esos tres pasos en regla, no hará falta nada más para circular con tranquilidad en la carretera. Ni tampoco tendrás que pasar una ITV extraordinaria de homologación ni incluirlas en la ficha técnica.
Es posible que hayas visto alguna vez lunas tintadas delanteras y quieras tenerlas en tu coche también. Pero no podrás hacerlo si resides en España. En nuestro país solo está permitido el tintado de lunas traseras. Ni las ventillas laterales delanteras ni la luna frontal pueden tintarse, a excepción de los vehículos policiales. Es común verlo en coches extranjeros, puesto que en algunos países la legislación si lo permite.