Hay varios factores que afecta directamente a la percepción del conductor al volante. En primer lugar, la luz ambiental que empeora cuando es un día lluvioso. También la distorsión del entorno visual debido a las luces de los faros o las gotas de lluvia del parabrisas. Y, en tercer lugar, puede influir el mal estado del parabrisas ya sea por suciedad, desperfectos, arañazos o desgaste. Desde Autolunas Carabanchel queremos proponer una solución a este problema que son los llamados repelentes de agua.
El objetivo principal de los repelentes de agua es mejorar la visibilidad. Lo hacen añadiendo una capacidad hidrofóbica en los parabrisas o en cualquier cristal del coche. Usando este tipo de tratamiento a partir de los 80-90 km/h ya no será necesario el uso de limpiaparabrisas. Para conocer más acerca de los beneficios con los que cuentan los repelentes de agua, ¡sigue leyendo!
Ventajas que tienen los repelentes de agua
- Mejorar la visibilidad: es el primero y más importante de los beneficios que tienen los repelentes. Tener una buena visibilidad es clave, por eso conducimos más seguros en días despejados. Al hacerlo bajo la lluvia, la visibilidad se disminuye de forma considerable y respuesta a un imprevisto será mucho más tardía. El riesgo de accidente aumenta con días lluviosos, por eso este tratamiento nos proporcionará la confianza extra y real contra el agua.
- Dificulta la adherencia: con el tratamiento con repelentes de agua, crea una nueva capa de producto en los cristales del coche. Eso significa que servirá como protector de los mosquitos que chocan contra el cristal y se quedan pegados. Notaremos una menor suciedad cuando conducimos al dificultar la adherencia de todo tipo de insectos.
- Durabilidad de los limpiaparabrisas: es conocido que el uso constante del roce de las escobillas contra el cristal puede llegar a dañar o arañar la superficie, sobre todo si hay suciedad. Si vives en una zona con muchos días de lluvia al año, es recomendable darles una oportunidad a los repelentes de agua. Éstos evitarán un desgate anticipado de los limpiaparabrisas.